Mercedes cierra 2025 como subcampeón en la era post-Hamilton

La temporada 2025 marcó un punto de inflexión para Mercedes-AMG Petronas, afrontando su primera campaña completa sin Lewis Hamilton tras años de dominio conjunto. A pesar de quedar lejos del campeón McLaren, las Flechas de Plata lograron escalar dos posiciones respecto a 2024, asegurando el subcampeonato de constructores en un año de transición.

El equipo de Brackley terminó en segunda posición del Campeonato de Constructores, mejorando sustancialmente su cuarto lugar del año anterior. Sin embargo, la brecha con McLaren fue considerable: 364 puntos separaron a ambas escuderías, evidenciando el dominio absoluto del equipo de Woking durante toda la temporada.

George Russell se consolidó como líder indiscutible del proyecto Mercedes en esta nueva era, logrando dos victorias en grandes premios que resultaron fundamentales para mantener al equipo en la lucha por las posiciones de honor. Estas victorias no solo aportaron puntos valiosos, sino que demostraron que las Flechas de Plata mantienen el potencial competitivo necesario para pelear en la parte alta de la parrilla.

El balance de la temporada adquiere una dimensión especialmente positiva si se considera el contexto: 2025 fue un año de adaptación tras la salida de Hamilton, uno de los pilotos más exitosos en la historia de la escudería. La capacidad del equipo para mejorar posiciones en el campeonato durante este proceso de transición habla del trabajo sólido realizado tanto en la pista como en la fábrica.

De cara al futuro, Mercedes mira con optimismo hacia 2026, año en que entrará en vigor un nuevo reglamento técnico que redistribuirá las cartas en la Fórmula 1. Esta revolución normativa representa una oportunidad perfecta para que las Flechas de Plata regresen a la lucha por el campeonato, aprovechando su experiencia y recursos para diseñar un monoplaza ganador desde cero.

El desafío para el equipo alemán será claro: utilizar 2025 como plataforma de aprendizaje y desarrollo, perfeccionando los procesos internos y la estructura del equipo para aprovechar al máximo la ventana que abrirán las nuevas regulaciones. Con un Russell en plena madurez deportiva y los cimientos técnicos bien establecidos, Mercedes tiene motivos para mirar el horizonte con confianza renovada.